“¡Tú puedes! ¡Tú tienes todo lo necesario dentro de ti para triunfar! “ Frases como éstas nos enseñan desde pequeños a confiar en nosotros mismos. Y es bueno motivar a otros para ayudarles con su autoestima, pero cuando abrimos nuestros ojos al mundo espiritual, a una vida nueva en Cristo, muchas cosas van a cambiar, y parecerán contrarias a la lógica que nos ha guiado por años. El mundo nos dice que debemos empoderarnos. Esta de moda la frase de “mujeres empoderadas” pero creo que a veces podríamos confundirnos con entender dónde se encuentra el poder. Nos dicen que podemos lograr todo lo que nos propongamos, más las escrituras dicen : “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”. Mi poder viene de lo alto, junto con la sabiduría. Creo que los años de experiencia nos llevan a confiar primeramente en nuestro conocimiento, que nos ha costado y hemos adquirido con el tiempo, y luego evaluamos las demás alternativas. El único conocimiento que podemos confiar, que hemos adquirido con el tiempo, es que Dios conoce nuestros caminos y sabe lo que es mejor para nosotros, aunque de momento, las circunstancias parezcan muy desfavorables para nuestro lado. El ejercitar la fe, nos lleva a una fe más profunda cada vez, donde es mucho más que lo que vemos frente a nosotros, es lo que creemos, nuestra convicción es más fuerte que los problemas. Nuestro conocimiento está contaminado por todo lo que el mundo nos ha programado a través de la televisión, prensa, internet, cine, y muchas veces la solución a un problema, es esperar en el Señor, y no el tomar una acción inmediata, como nuestros instintos lo harían. Confiar en Dios va contra nuestra naturaleza controladora, y que no confía en nadie por las veces que alguien nos ha fallado. Mientras mas nos han herido, más controladores nos volvemos, porque no confiamos en nadie, y como mecanismo de defensa, queremos tener el control de todo lo que pueda afectarnos. Pero ese control es falso. ¡No podemos controlar nada en este mundo! El único control lo tiene Dios, quien creó todas las cosas y las sustenta. Para no ser sabios en nuestra propia prudencia, debemos conocer las escrituras. Sé que puedo confiar en Dios porque Él es fiel. Puedo confiar en Él porque no cambia. Puedo confiar en Él porque es Todopoderoso. Puedo confiar en Él porque todo lo conoce. Puedo confiar en Él porque es amor y me ama como nadie en este mundo puede hacerlo. Debo conocer más acerca de Él para darme cuenta, de que realmente todo lo que he conquistado hasta el día de hoy es por su gracia y misericordia, y nada bueno puedo yo aportar que no provenga de Él. Confiar en Él me traerá paz. Oremos al Señor para que sea Él quien dirija nuestros pasos y nos lleve a vivir una vida en paz, la vid abundante que quiere para nosotros. Que entendamos que podemos vencer con su poder en nuestras vidas, conforme a Su voluntad, y su voluntad es agradable y perfecta.
0 Comments
Leave a Reply. |
AutoraMe llamo Myrnaly y resido en Ponce, Puerto Rico. Soy Cristiana, esposa, madre, y profesional. Tengo un Dios que me sostiene en Su Gracia y Misericordia, y renueva mis fuerzas cada dia. Blog Anteriores
September 2019
Categories |